Francy Julieth Díez Díaz 

Nutricionista Integral

Mentora de la Academia de Sabiduría Universal

 

Hoy nos sumergiremos en el fascinante mundo de la nutrición intuitiva, una forma de alimentación que va más allá de dietas restrictivas y nos invita a conectar con la sabiduría de nuestro cuerpo.

En este momento hay información variada con mensajes sobre qué comer y qué no comer, la nutrición intuitiva nos ofrece un enfoque diferente y liberador. En lugar de seguir dietas estrictas o contar calorías, nos invita a sintonizar con nuestras necesidades físicas, emocionales y espirituales en cada comida.

En el corazón de la alimentación intuitiva está la práctica de escuchar a nuestro cuerpo. ¿Qué nos está diciendo nuestro estómago? ¿Qué alimentos nos hacen sentir más enérgicos y vibrantes? ¿Qué emociones están influyendo en nuestras elecciones alimentarias en este momento? La nutrición intuitiva nos anima a hacer estas preguntas y a confiar en las respuestas que encontramos dentro de nosotros mismos.

Una parte fundamental de la nutrición intuitiva es dejar de lado la culpa y el juicio en torno a la comida. En lugar de etiquetar los alimentos como “buenos” o “malos”, nos centramos en cultivar una relación amorosa y compasiva con la comida. Reconocemos que todos los alimentos tienen un lugar en nuestra vida y que cada elección alimentaria es una oportunidad para practicar el autocuidado y la autoaceptación.

Según el libro “Alimentación Intuitiva: El retorno a los hábitos alimentarios naturales” de Evelyn Tribole y Elyse Resch, se reconocen 10 principios básicos de la alimentación intuitiva que normalizan la relación con la comida:

  1. Rechazar la mentalidad de dieta: las dietas que te ofrecen la falsa esperanza de perder peso rápida, fácil y permanentemente te impedirán ser libre para redescubrir la alimentación intuitiva 

 

  1. Honra tu hambre: Aprende a honrar esta primera señal biológica, prepara el escenario para reconstruir la confianza en ti mismo y en la comida

 

  1. Hacer la paz con la comida: Date permiso incondicional para comer, si se dice a sí mismo que no puede o no debe comer un alimento en particular, puede provocar sentimientos intensos de privación que se convierten en antojos incontrolables y, a menudo, atracones.

 

  1. Desafío a la policía alimentaria: La estación de policía se encuentra en lo profundo de tu psique, y su altavoz grita púas negativas, frases desesperadas y acusaciones que provocan culpa. Ahuyentar a la policía alimentaria es un paso fundamental para volver a la alimentación intuitiva.

 

  1. Siente tu plenitud: Escucha las señales corporales que te indican que ya no tienes hambre. Observa las señales que muestran que estás cómodamente lleno. Haz una pausa en medio de una comida o un refrigerio y pregúntate cómo sabe la comida y cuál es tu nivel actual de saciedad.

 

  1. Descubre el factor de satisfacción: Cuando comes lo que realmente quieres, en un ambiente que invita, el placer que obtienes será una fuerza poderosa que te ayudará a sentirte satisfecho y contento. Al brindarte esta experiencia, descubrirás que se necesita mucha menos comida para decidir que has tenido “suficiente”. Los japoneses tienen la sabiduría de mantener el placer como uno de sus objetivos de una vida saludable.

 

  1. Enfrenta tus emociones sin utilizar alimentos: Encuentra formas de consolar, nutrir, distraer y resolver tus problemas emocionales sin consumir alimentos. En todo caso, comer por hambre emocional solo te hará sentir peor a largo plazo. En última instancia, tendrás que lidiar con la fuente de la emoción, así como con la incomodidad de comer en exceso.

 

  1. Respeta tu cuerpo: Respeta tu cuerpo para que puedas sentirte mejor acerca de quién eres. Es difícil rechazar la mentalidad de la dieta si no eres realista y eres demasiado crítico con la forma de tu cuerpo.

 

  1. Ejercicio, siente la diferencia: Cambia tu enfoque a cómo se siente al mover el cuerpo, en lugar del efecto de quema de calorías del ejercicio. Si al despertar tu único objetivo es adelgazar, no suele ser un factor motivador en ese momento.

 

  1. Honra tu salud: una nutrición suave Elige alimentos que respeten tu salud y tus papilas gustativas a la vez que te hacen sentir bien. Recuerda que no es necesario que sigas una dieta perfecta para estar sano.

 

En resumen, la nutrición intuitiva nos recuerda que la alimentación es mucho más que simplemente nutrir nuestro cuerpo físico. Es un acto sagrado de autocuidado y amor propio, una oportunidad para conectarnos más profundamente con nosotros mismos y con el mundo que nos rodea. En la Academia de Sabiduría Universal, nos comprometemos a explorar y celebrar esta sabiduría ancestral que vive dentro de cada uno de nosotros.

Con amor 

Francy Díez 

Nutricionista Integral